Legión del Kaos. Nº14. Detras de la mascara.

Lo que siempre se mantiene intacto ante estas catástrofes es el aeropuerto, siempre está igual, y eso me hace sospechar que todo esto de los robots gigantes y monstruos marinos destruyendo Tokio cada cuatro meses, no sea un truco de las aerolíneas para vender pasajes de avión a los que emprenden el éxodo a ciudades vecinas a esperar que Tokio sea reconstruida.
-¡La destruyeron por completo! –se asombró Emina.
-Es normal, rubia…los japoneses estamos acostumbrados a caernos y levantarnos… -dijo Shonen.
-Siento algo de radiación en el ambiente –dijo la rubia heroína ucraniana.
-Es parte de la ciudad, Tokio es una ciudad nuclear.
-¿Y no se mueren de envenenamiento radioactivo?
-Son niveles bajos, además tenemos a Tohiro “El Absorbedor”, es un tipo que tiene la capacidad de absorber la radiación y eliminarla en forma de flatulencias inofensivas.
-No me gustaría conocerlo…
-No te preocupes, rara vez se deja ver. Tal vez puedas olerlo…
Solo hay cascos amarillos como siempre. Los restauradores, ellos se encargan de volver a poner a la ciudad en funcionamiento, son androides de mi mentor el profesor Matsuo. Hablando de Matsuo debo ir a verlo y no creo que sea conveniente que Legión me acompañe.
-Yo debo irme, ustedes pueden ayudar a los Restauradores a remover escombros –dijo Shonen más como una orden que como una sugerencia.
-¡Perfecto, viajamos miles de kilómetros para remover escombros! –protestó Mig.
-Este esteriotipo gay no piensa ensuciarse las uñas removiendo piedras –sentenció American Man.
-Esta niña llena de radiación…tampoco –continuó Emina.
-Por lo tanto este ultimo representante del comunismo soviético, será el único que hará algo útil esta tarde. Voy a por unas cervezas… ¿Alguien quiere algo?

Laboratorio del profesor Matsuo.

-¡*******, que alegría verte! –exclamó Matsuo al ver a Shonen Doll cruzar la puerta de su laboratorio.
-Ya le dije que no uso ese nombre, por favor. No me ponga en vergüenza.
-Lo siento Shonen, yo siempre te recordare así, como uno de los mejores discípulos que tuve.
-Junto con Amano. Éramos los mejores.
-De el precisamente quería hablarte…se volvió loco, construyó un robot usando tecnología bionuclear.
-Pensé que la tecnología bionuclear era apenas una teoría…
-…Me temo que no Shonen, el ha logrado fusionar partículas nucleares con células humanas y ha construido un robot, que dejo a Pop y a Techno fuera de combate en menos de veinte minutos.
-¿Y que demonios quiere Amano?
-¡Te quiero a ti! –respondió una voz que provenía de un cubículo del laboratorio. -*******, es bueno verte…
-Ya no me llamo *******, soy Shonen Doll, ¿te queda claro? Profesor Matsuo ¿Me tendió una trampa o me parece a mí?
-Lo lamento *******…
-Momento, la verdad que ya me está hinchando las bolas eso de andar poniendo asteriscos en lugar de tu nombre Shonen.
-¿Qué demonios?
-Yo el Jardinero del Kaos. Así que tienes dos opciones: o convences a todos para que te llamen Shonen Doll o develas lo que escondes.
-Jardinero, por favor. Un esfuerzo mas…
-Perdón, ¿Con quien mierda estás hablando Shonen?
-Que mierda te importa, que pretenden ustedes de mí, traidores. Mi mentor y mi “mejor amigo” tendiéndome una trampa.
-Una pelea. Nada más que eso –respondió Amano. –Ah, y el que gane se queda con tu katana.
-¿Y a todo esto yo que gano? –preguntó Shonen.
-Por empezar. Que mi robot no mate al marica, a la rubia tonta y al comunista que tienes por amigos.
Una pantalla de plasma mostró en un plano a los tres legionarios a punto de enfrentarse al enorme robot que los había tomado por sorpresa.
-Si es lo que quieres…
Shonen Doll se lanzó a la pelea con su viejo amigo, ambos tenían un amplio dominio de las artes marciales, todavía no se habían tocado, y ya llevaban mas de diez minutos lanzándose puñetazos y patadas, el primero en recibir un golpe fue Amano, pero no demoraría mucho en devolver la gentileza clavándole los nudillos en el medio de la mascara de Shonen. La muñeca se desconcertó, sintió otro golpe en la mascara, y otro, y otro mas. En menos de un segundo la mascara estaba hecha añicos y Shonen Doll no podía mantenerse en pie, la hemorragia de la nariz no le permitía respirar adecuadamente. Fue ahí cuando Amano desenvainó su Katta y corto a Shonen en cuanta parte del cuerpo pudo.
La mascara cayó al piso completamente destrozada.
Amano le dio un derechazo al rostro agonizante de Shonen y sus cabellos negros volaron por los aires.
-Ahora estoy frente a la persona con quien quería pelear –dijo Amano. –mi viejo amigo Yoshi.
-Lo lamento Shonen, ya no puedo poner mas asteriscos.
-Por mas que te ocultes detrás de esa mascara de muñeca y ese vestido de colegiala seguirás siendo un hombre, viejo amigo.
-Soy lo que elijo ser….jjjjjptff –dijo Yoshi (Shonen Doll) y escupió un coagulo de sangre. –ahora tendrás que morir Amano, me has humillado… ¿Dónde demonios?
-¿Estás buscando esto? –preguntó Amano mientras sostenía la Katana de Shonen (si esa que es capaz de convocar a los espíritus guerreros)
El/La Héroe/Heroína estaba perdido/a…

Continúa…